La ley D’Hondt
La Ley D’hondt es aplicada en numerosas democracias para asignar escaños en cuerpos legislativos de forma proporcional. A pesar de su amplio uso, la ley D’Hondt a menudo es objeto de malentendidos o desconocimiento por parte de muchos ciudadanos.
Tabla de contenidos
Qué es la Ley D’Hondt
La ley D’Hondt, también conocida como el método D’Hondt, es un sistema matemático utilizado para asignar escaños en elecciones proporcionales. Este método lleva el nombre de su creador, el jurista y matemático belga Victor D’Hondt, quien lo diseñó en 1878. Su principal objetivo es convertir los votos obtenidos por las diferentes formaciones políticas en escaños de una manera que refleje de forma equitativa la proporción de votos recibidos, aunque favorece ligeramente a los partidos más grandes frente a los más pequeños.
En esencia, la ley D’Hondt es un método de promedios más altos, lo que significa que asigna escaños dividiendo los votos de cada partido por una serie de divisores y luego otorgando los escaños a los mayores cocientes obtenidos. Este mecanismo busca un equilibrio entre la representatividad y la gobernabilidad, permitiendo formar mayorías más estables en cuerpos legislativos donde ningún partido tiene una mayoría absoluta.
El método se usa ampliamente no solo en España, sino también en otros países europeos y en diferentes niveles de gobierno, desde el parlamentario hasta el municipal. Su aplicación ha sido fundamental en sistemas políticos que buscan la proporcionalidad sin fragmentar excesivamente el parlamento, facilitando así la formación de gobiernos y evitando la excesiva atomización partidista.
Origen de la Ley D’Hondt
El origen de la ley D’Hondt se remonta a finales del siglo XIX, específicamente al año 1878, cuando el jurista y matemático belga Victor D’Hondt publicó su método en un intento de resolver los problemas inherentes a la representación proporcional en las democracias parlamentarias. D’Hondt estaba motivado por la necesidad de un sistema que, al mismo tiempo que garantizara la proporcionalidad en la asignación de escaños, evitara la excesiva fragmentación que podría dificultar la formación de gobiernos estables.
Victor D’Hondt, profesor de derecho civil en la Universidad de Gante, se dio cuenta de que los sistemas mayoritarios o de pluralidad, donde el ganador se lleva todo, no reflejaban de manera justa la diversidad de opiniones y preferencias de los votantes. Por otro lado, los sistemas puramente proporcionales sin ningún tipo de umbral podrían conducir a un parlamento demasiado dividido, complicando la creación de mayorías sólidas.
El método D’Hondt fue diseñado para ser un compromiso entre estos extremos, proporcionando un equilibrio entre representatividad y gobernabilidad. Desde su concepción, el método ha sido adoptado en numerosos países, no solo en Europa sino en todo el mundo, y ha demostrado ser particularmente efectivo en contextos políticos donde múltiples partidos compiten por la representación.
Cómo funciona la Ley D’Hondt
El funcionamiento de la ley D’Hondt se basa en un procedimiento matemático que transforma los votos obtenidos por cada partido en escaños de una manera que intenta ser lo más proporcional posible dentro de un marco que favorece la formación de gobiernos estables. Este método se utiliza en elecciones de varios niveles, desde parlamentos nacionales hasta corporaciones locales.
Paso a paso del método D’Hondt
- Totalización de votos y escaños a distribuir: Primero, se cuenta el total de votos válidos emitidos y se determina el número de escaños que se deben distribuir en la circunscripción electoral.
- Divisores: Cada partido político que ha superado el umbral mínimo requerido (normalmente un porcentaje específico de los votos) entra en la competición por los escaños. Los votos de cada partido se dividen sucesivamente por 1, 2, 3, 4,… hasta el número total de escaños a repartir.
- Cálculo de cocientes: Se calcula un conjunto de cocientes para cada partido. Por ejemplo, si un partido A obtuvo 10,000 votos y hay 5 escaños, los cocientes serían 10,000 (10,000/1), 5,000 (10,000/2), 3,333 (10,000/3), 2,500 (10,000/4), y 2,000 (10,000/5).
- Asignación de escaños: Todos los cocientes obtenidos de todos los partidos se ponen en una lista única y se ordenan de mayor a menor. Los escaños se asignan a los cocientes más altos hasta que se hayan repartido todos los escaños disponibles.
Ejemplo Ilustrativo
Imaginemos una elección con 100,000 votos y 10 escaños disponibles. Dos partidos, A y B, obtienen 40,000 y 30,000 votos respectivamente, y un tercer partido, C, consigue 20,000. Los cocientes se verían así:
- Partido A: 40,000, 20,000, 13,333, 10,000, 8,000…
- Partido B: 30,000, 15,000, 10,000, 7,500…
- Partido C: 20,000, 10,000, 6,666, 5,000…
Se asignarían los 10 escaños a los mayores cocientes, normalmente resultando en una distribución que favorece ligeramente a los partidos con más votos, facilitando así la formación de una mayoría más clara y estable.